En 2024, trabajábamos con pequeñas empresas
en Barcelona. Y una cosa que notamos
constantemente era que muchos propietarios
tenían problemas similares con sus finanzas
personales. No entendían por qué al final del
mes siempre faltaba dinero, aunque los
ingresos eran decentes.
Así que empezamos a crear talleres sencillos
sobre presupuestos. Nada complicado, solo
técnicas que usábamos nosotros mismos. La
respuesta fue increíble. La gente finalmente
entendía hacia dónde iba su dinero.
Eso nos llevó a fundar dolinarvexo. Queríamos
hacer que esta educación financiera estuviera
disponible para más personas. No con jerga
complicada ni teorías imposibles, sino con
métodos reales que funcionan para familias
reales en España.
Ahora, desde nuestras oficinas en Terrassa,
seguimos desarrollando contenido educativo
que ayuda a la gente a tomar mejores
decisiones con su dinero. Cada recurso que
creamos lo probamos primero nosotros, luego
con grupos pequeños, y solo después lo
compartimos.